Control de calidad

La promesa de fiabilidad es la base de nuestra actividad y de nuestra reputación.

Las pruebas y el control de calidad son fundamentales para garantizar que su producto sea el mejor posible. Cada uno de nuestros productos se somete a pruebas de funcionamiento, rendimiento y fugas de presión, y no sale de nuestra fábrica hasta que recibe el visto bueno. Esto significa conectar la bomba a la corriente y al agua y hacerla funcionar a presión para asegurarse de que todo está como debe. Eso no se consigue con una bomba más barata.

Se ha demostrado que nuestras bombas funcionan bien en algunos de los climas más duros del mundo; en nuestra fábrica reproducimos estas condiciones en nuestra cabina ambiental, donde nuestras bombas funcionan durante meses a 50 °C y 100% de humedad (¡eso es un poco de calor!).

Incluso sometemos nuestras bombas a “pruebas de tortura” y las probamos regularmente fuera de nuestra línea de montaje hasta 500.000 ciclos. Esto significa encender la bomba, llevarla hasta la presión y apagarla de nuevo, para indicar un ciclo. Estas pruebas equivalen a 10 años de uso doméstico por parte de una familia de 4 miembros, aunque muchas de estas bombas funcionan durante mucho más tiempo: 750.000 o incluso 1 millón de ciclos.

Para prolongar la vida útil de los rodamientos necesitamos que las vibraciones sean mínimas y, para conseguirlo, comprobamos periódicamente que nuestros motores se monten en el centro perfecto de la carcasa del motor.

El motor eléctrico es un componente importante y algo que no puede permitirse el lujo de fallar. En Davey, nos tomamos los motores muy en serio. Calentamos nuestras carcasas de motor a 140 grados y las encogemos sobre el estator para eliminar la posibilidad de movimiento que puede provocar fallos.

Puede confiar en Davey por su calidad y fiabilidad en todo momento.